(Washington, DC, 20 de febrero de 2015)—Hoy, el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano (HUD) de EE. UU. emitió una guía que aclara que los refugios para personas de un solo sexo que reciben fondos federales deben respetar la identidad de género de todos los residentes y brindar acceso a viviendas segregadas por sexo. refugios basados en la identidad de género.
El anuncio de HUD aclara la posición de la agencia sobre un tema que ha quedado sin resolver desde la Regla de Igualdad de Acceso LGBTQ de 2012. Esta regla prohíbe la discriminación basada en la orientación sexual, la identidad de género y el estado civil en todos los programas y servicios de vivienda pública administrados o financiados por HUD. Esta nueva guía sobre la Regla de Igualdad de Acceso LGBTQ proporciona una aclaración muy necesaria con respecto a las obligaciones de los concesionarios sobre el tratamiento de las personas transgénero que buscan refugio.
Declaración de la directora de políticas de NCLR, Maya Rupert:
“Aplaudimos a HUD por emitir esta explicación crítica. La discriminación contra las personas transgénero que buscan refugio es uno de los tipos de discriminación en materia de vivienda más significativos y peligrosos a los que se enfrenta la comunidad LGBTQ. Las personas intentan acceder a los albergues en uno de los momentos más vulnerables de sus vidas. Obligar a una persona transgénero a ser alojada por el sexo equivocado en un refugio es una violación terrible y ha resultado en que a muchas de ellas se les niegue el acceso a un refugio de emergencia. HUD aclarando que esto constituye discriminación salvará la vida de muchas personas transgénero. Esperamos continuar trabajando con HUD para garantizar que esta guía se integre completamente en la Regla de acceso igualitario LGBTQ”.
El anuncio de hoy significa que todos los refugios que reciben fondos de HUD, que constituyen un porcentaje significativo de los refugios que operan en el país, deben permitir que las personas transgénero y de género no conforme accedan al refugio que corresponda con su identidad de género. Esta nueva guía también disuade a los refugios de solicitar cualquier documentación como prueba de la identidad de género afirmada de un solicitante de refugio e insta a los beneficiarios a brindar capacitación de competencia cultural para el personal de las instalaciones sobre las mejores prácticas para trabajar con la comunidad transgénero.