No sé ustedes, pero las últimas tres semanas han sido un torbellino. El fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos del 26 de junio que reconoce nuestra libertad para casarnos es una nueva marca de agua para nuestro movimiento. A medida que esta nueva realidad se instala, siento una profunda gratitud por estar aquí como testigo. Es el mayor honor de mi carrera que NCLR haya desempeñado un papel central en la obtención del matrimonio igualitario. Tú hiciste esto posible.
Ahora es el momento de aprovechar esta nueva energía. Ahora es el momento de capitalizar este impulso y nuestra libertad recién acuñada, para redoblar nuestros esfuerzos para terminar el trabajo de asegurar que cada persona LGBTQ viva con plena dignidad e igualdad.
Todos ustedes saben cuánto amo este trabajo y la pasión que siento cada día por nuestro trabajo y por su inversión y apoyo. He estado viviendo esa pasión todos los días desde el 26 de junio.
También tengo la suerte de tener una esposa e hijos que me apoyan, me aman y "viven la vida al máximo". Estas últimas tres semanas han entrelazado estas dos partes de mi vida de maneras tanto alegres como conmovedoras. El producto de este "matrimonio" (lo siento, no pude evitarlo), fue publicado en el San Francisco Chronicle ayer 19 de julio.
Pueden coexistir dos realidades, pero cuando una de esas realidades pone en peligro nuestro futuro y nuestros logros, debemos cambiarla. Tengo absoluta confianza en que nos ayudarás a llegar allí una vez más.
Adelante,
kate kendell
Director Ejecutivo de NCLR