James Doe fue coronel de las Fuerzas Armadas de los EE. UU. y sirvió con honor durante veintisiete años antes de jubilarse. Él y su esposa, Susan Doe, tienen un hijo transgénero, John. TRICARE, el seguro médico que proporcionaba a los militares activos y retirados y sus familias, se negaba a cubrir los medicamentos que retrasan la pubertad para tratar la disforia de género de John debido a una exclusión para el tratamiento de la disforia de género. Sin ese medicamento, John habría pasado por una pubertad equivocada, lo que tendría consecuencias devastadoras para su salud mental y física.
El 14 de junio de 2016, el Centro Nacional para los Derechos LGBTQ y Kirkland & Ellis LLP demandaron a Estados Unidos y al Departamento de Defensa para impugnar dicha exclusión. Casi inmediatamente después de presentar la demanda, el gobierno de Obama acordó eliminar la exclusión y garantizar que John recibiera la atención que necesitaba. Las partes acordaron desestimar el caso en marzo de 2017.