Al crecer, me enseñaron que hay cosas de las que no se habla. Como hija de inmigrantes mexicanos, aprendí que los temas que no estaban destinados a una conversación educada eran muchos y variados. Temas como la salud mental, la orientación sexual y las dificultades familiares quedaron fuera de la mesa. Es un silencio generacional, transmitido de generación en generación, transportado a través de fronteras y encontrando un nuevo suelo en los Estados Unidos. Es un silencio que mata. Un ejemplo de cómo este silencio tiene profundamente...